El pasado esta gravado en la nieve [Privado]

Observo el mar sonriente. El mar le recordaba a su casa, a la isla donde se crio durante los primeros años de su vida. Suerte que este no estaba plagado de sirenas que intentaban comerte a la minima de cambio. Pese a que el mar le gustara, le costo bastante el superar el miedo a meterse. Su padre le ayudo a superarlo, aunque al principio no hiciera más que gastarle bromas para asustarle, pero él era asi, su tío Thoris se lo habia advertido.

Se quito la gorra y dejo que los rayos del astro rey le atravesaran. Hechaba de menos la calidez de los rayos secando su ropa y su piel, creando brillos en su pelo blanco, pero ya no era posible. Avanzo unos pasos y se sento en el borde. La bufanda ondeaba lentamente al compas de un viento inexistente, el viento que ondeaba el dia en el que su padre le mato. Sacudio la cabeza, ahora no podia pensar en eso. Ahora solo debia pensar que debia decirle a su padre para que se lo llevara de vuelta a Grecia.

Las primeras luces del día traspasaban la ventana de la habitación del ucraniano, en donde se encontraba este ya vestido, agarrando algunos artefactos, preparándose de esa manera para salir. Pudo notar casi enseguida que iba a ser un día como cualquier otro, con el frío inundando su cuerpo, pero eso ya era común en el blondo. Al terminar sus preparativos, abrió la puerta de su casa pudiendo sentir sobre su cara algunas ondas de viento que quedaban perfectamente con el clima.

Comenzó a caminar en dirección hacia el bosque, con rumbo hacia las afueras del pueblo. No tenía muchas cosas que hacer, no era una persona muy ocupada que digamos. Caminaba de forma lenta por el bosque, nadie lo estaba apurando, él tampoco tenía una urgencia, así que no iba a ir deprisa. Pudo notar la presencia de algunas hadas en el bosque, aunque no les prestó suma atención. Cada vez que daba un paso, un paso mas que lo alejaba del pueblo acercándolo al acantilado, el viento se volvía mas frío. Estaba muy bien acostumbrado a eso, es mas, esta brisa no era tan fría para el ucraniano.

Ya podía contemplar a la distancia el acantilado. Dio un suspiro y una sonrisa se curvo en su rostro. Se acerco cada vez mas, aunque ya se había dado cuenta desde antes de la presencia de alguien mas, pero no era algo muy común, eso le llamó la atención al ucraniano. Sentía una presencia allí, en el acantilado, mas no lograba verla. Se acerco hasta estar casi al final del acantilado mirando en dirección en donde debería de haber alguien, aunque no la viera. Suspiro, capaz era solo su imaginación, pero no podía dejar de mirar hacia ese lugar. Capaz es un fantasma Pensó, siendo una posibilidad y que este no se dejara ver, a menos que este quiera.

- Hola...? -mencionó simplemente, aunque dudaba de si iba a recibir alguna respuesta o no. Si no recibía ninguna respuesta significaba que solo era su imaginación. No sabía si quería recibir una o no, pero la curiosidad lo mataba.